miércoles, 20 de mayo de 2009

TU CUERPO ES UNA PATRIA EN VÉRTIGO

El poema como un acto de amor luminoso, de querer franco. Mujer, hijo, poesía y pueblo son en Inti Clark el hecho cotidiano. Como en una búsqueda hacia la raíz del Ser, el poeta nos presenta: Tu cuerpo es una patria en vértigo, poemario ganador de la III Bienal Nacional de Literatura Ramón Palomares (Fondo Editorial Arturo Cardozo 2007), libro soleado por la mirada costeña de un poeta sencillo y honesto al que:

No me interesan los textos guabinosos

de los herejes de la poesía

reniego del brindis y acaricio el perro honesto

que se encarama en la pierna.


Inti Clark, falconiano, heredero del mar y la tarde, sabe dejar atrás “el solazo de la muerte” se le escabulle con sus recuerdos, memoria adentro, porque:

Los marinos no se deprimen
sólo llevan el pecho apretao

y un frío que sacude la foto familiar.


Para el poeta, como buen hijo de Alí, su gente es la patria y la patria no muere, así, con el optimismo de la nueva poesía venezolana, esa que signa el comienzo de siglo, se hace cofundador de una nueva voz que asume la escritura como el más poderoso acto reivindicativo.

Tocototín: No hay futuro sin victorias. No hay futuro sin pueblo alegre.
Llega desde el corazón de la tierra una felicidad combativa.

Llegan rostros con brillo heroico y todos cantan tan alto
que
nubes y aves y el mar escondido tienen la melodía única
de la voz
bolivariana, indomesticable.

Dividido en cuatro partes, Tu cuerpo es una patria en vértigo, nos orienta la mirada hacia el orden cotidiano, donde el autor alcanza su mayor expresividad al revelar espacios que de tan comunes, inadvertimos, y que representan, en su pluma, un auténtico mapa emocional.

Hoy dijiste Pablo.
Te nombraste como un acordeón.
Ya te pertenecés hijo,

saliste de una mudez que no te apretaba los ojos
ni la risa
y ahora llegaste al canto decisivo


Hijo mío, ahora ya no estás tan indefenso o debilucho
la palabra Pablo vence hasta la fiebre y los vómitos pendejos
de hace meses

no cuidés la pronunciación

porque a este mundo le hacen falta los desafinaos

como también los que van a tientas, temblereques

Dormite, yo te arropo con mis ojos aguarapaos
y el relincho de amarte.



Juan Manuel Parada

1 comentario :

JUAN MANUEL PARADA dijo...

INTI CLARK DIJO:

Hermano Juan Manuel, gracias por esas palabras y bueno, lo único que puedo decirte es que uno se vuelve menos egoista cuando escribe de otros, de los escritores que uno va queriendo y leyendo.

Gracias hermano, estamos haciendo patria y usted es uno de ellos, desde la literatura y la cultura de este país.

Abrazos eternos y mil gracias

PS: esos poemas que citaste son de los que más quiero.